Este morral representa un elemento indispensable en la vida de montaña de excombatientes de las antiguas FARC-EP. Por años, internados en la selva, los sastres de Farc fabricaban uniformes, sudaderas, morrales, carpas e indumentaria de guerra. En estos estilos de bolso llevaban todo: las municiones, el traste de la comida, los libros, el cambuche (carpa de campaña).
Los productos de Confecciones La Montaña son elaborados por exguerrilleros y exguerrilleras con discapacidades físicas producidas por heridas de guerra causadas por el conflicto, así mismo, por las parejas y compañeras de los exguerrilleros en proceso de reincorporación, y que hoy gracias al acuerdo de Paz son madres de familia.
Actualmente, dependen económicamente de esta iniciativa productiva alrededor de 10 familias y 15 excombatientes, y en la medida que comienza a crecer el proyecto, comienza a ser una fuente de empleo para la misma comunidad.